¿Alguna vez has observado cómo las gaviotas suben y bajan cuando se posan en la superficie del mar? Es posible que también hayas visto a surfistas subirse a una ola que los lleva hasta la orilla. Tal vez hayas estado flotando en un lago y hayas notado cómo subías y bajabas cuando pasaba una ola. O tal vez hayas visto escombros arrastrados por las olas, como trozos de madera a la deriva. Las olas son fascinantes: las hay de todos los tamaños, desde una pequeña onda hasta olas monstruosas de 10 metros de altura. Las has visto, pero ¿sabes qué las impulsa y cómo se mueven a través de océanos y mares?
En esta actividad, transportarás el mar a casa y harás olas en una botella. También mejorarás tus habilidades de observación y descubrirás por qué algunas olas son lentas y otras rápidas.
El viento causa gran parte de las olas en mares y océanos. Así es como funciona: El viento hace que el agua se acumule por encima del nivel del agua que no se mueve. El agua debajo de la cresta (o pico) de una ola recibe el agua adicional que la empuja abajo. A continuación, el peso extra empuja el agua por debajo del pico de la ola. El agua en movimiento pasa por arriba y crea un pico en un nuevo lugar, por lo que la ola avanza.
Los océanos y los mares son capas de agua bajo una capa de aire, la atmósfera. Debido a que el aire es mucho menos denso que el agua (pesa unas 1000 veces menos que la misma cantidad de agua), podríamos pensar que el aire tendría poca influencia sobre una ola. Así que, para comprender cómo funcionan las olas, añadiremos una capa de aceite sobre el agua. ¿Tienes curiosidad por saber cómo se relaciona esto con el aire y cómo afecta a una ola en la superficie del agua? ¡Remángate y prueba esta emocionante actividad científica!
¿Has observado que el agua con aceite en la parte de arriba produce ondas sorprendentemente lentas?
Una ola se mueve porque el peso adicional del líquido en el pico de la ola empuja el agua desde debajo del pico hacia lugares donde el agua es menos profunda. Esto sucede en ambas botellas.
En el caso de la botella con agua y aire, tanto el agua como el aire empujan las capas más profundas de agua. El aire es aproximadamente mil veces menos denso que el agua, por lo que, cuando pasa una ola, las capas más profundas de agua reciben principalmente el peso de toda el agua acumulada en la ola. La diferencia de peso entre la cresta y el punto mínimo (o punto más bajo) es la fuerza impulsora de la ola. En este caso, la gran diferencia de peso da como resultado una ola que se mueve rápidamente.
De manera similar, en el caso de la botella con agua y aceite, el agua y el aceite empujan las capas más profundas de agua. Al igual que el aire, el aceite es menos denso que el agua (aproximadamente dos tercios), por lo que una cantidad de aceite pesa menos que la misma cantidad de agua. Por lo tanto, a medida que el agua se acumula en una ola, más agua y menos aceite presionarán hacia abajo en un punto debajo del pico de la ola. Sin embargo, en el punto menos profundo de una ola, más aceite y menos agua presionan sobre el agua debajo. Como resultado, la diferencia en el peso de los líquidos en un punto debajo de la cresta y un punto debajo del punto mínimo es mucho menor en este caso, por lo que la fuerza impulsora de la ola es mucho menor, aunque sigue obligando al agua a moverse desde debajo del pico de la ola. Además, el agua y el aceite más pesado que el aire deben moverse, por lo que los líquidos fluyen mucho más lentamente que cuando el aire ligero fluye sobre el agua. Lo que observas es una ola en la superficie del agua que se desplaza mucho más lentamente.
En la actividad extra probablemente has observado que la cera se movía principalmente hacia arriba y hacia abajo mientras que la ola se movía hacia adelante y hacia atrás. Esto se debe a que, en una ola, es el agua debajo de la ola la que se mueve horizontalmente; el agua de la superficie se mueve hacia arriba y hacia abajo.
Puedes verter el contenido de la botella solo con agua de color por el desagüe. ¡Pero no viertas el aceite por el desagüe!
Coloca la botella con agua y aceite en posición vertical y déjala así un tiempo para que los líquidos se separen. Selecciona un recipiente o una botella (como la que usaste para el agua coloreada) para recoger el aceite. Vierte lentamente la capa de aceite en un recipiente o en una botella limpia. No importa si cae algo de agua, pero haz lo posible para transferir la mayor parte del aceite. (Utiliza un embudo si tienes uno). Puedes verter el agua coloreada que queda por el desagüe. Lleva el aceite de cocina usado al punto limpio para reciclarlo. (El aceite de cocina usado se puede convertir en biodiésel, un combustible no tóxico y biodegradable que puede impulsar coches y autobuses y produce menos contaminantes en el aire que el diésel a base de petróleo).